La inversión del proyecto supera los $17.000 millones y le permitirá mejorar los procesos productivos y continuar con la consolidación de su negocio.
Alpina puso en operación su nueva planta pulverizadora de leche en Sopó, Cundinamarca, que le permitirá procesar 120.000 litros de leche diarios (cerca del 15% del acopio total de la compañía) y habilitará el almacenamiento en periodos de abundancia y posibilita suplir las necesidades en tiempos de escasez.
“La pulverizadora nos genera orgullo y nos motiva a seguir trabajando por el desarrollo del campo y de los ganaderos. A su vez, nos permite seguir innovando en nuestro portafolio y continuar ofreciendo productos diferenciados a los consumidores”, dijo Ernesto Fajardo, presidente de la compañía.
La nueva planta le permitirá a la compañía seguir trabajando en la productividad de los ganaderos y evolucionar para buscar nuevos modelos de negocio con ellos.
Alpina acopia más de 3.000 ganaderos que día a día proveen esta materia prima en Cundinamarca, Antioquia, Nariño, Cauca y Boyacá.
La planta pulverizadora de leche abre la posibilidad de desarrollar nuevos ingredientes y diversificar el portafolio para continuar ofreciendo productos de valor agregado no solamente a consumidores colombianos, sino habilitar mercados internacionales.
Fajardo dijo que el nuevo proyecto está alineado con los objetivos de sostenibilidad de la compañía, ya que la planta cuenta con una tecnología que le permite reducir el consumo de energía y disminuir las emisiones por cada tonelada producida y, también, tendrá una huella de carbono neutra.