En un contexto donde la sostenibilidad es cada vez más crucial para las organizaciones, Cargill, a través de su filial Pollos Bucanero S.A., ha alcanzado un hito significativo al recibir el Sello de Sostenibilidad Avícola en su categoría Diamante, la más alta distinción otorgada por la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (FENAVI). Este reconocimiento resalta el compromiso de Cargill con prácticas sostenibles que abarcan desde el bienestar animal hasta el impacto social y ambiental.
Un Sello de Sostenibilidad con impacto real
El Sello de Sostenibilidad Avícola, desarrollado por FENAVI y FONAV, es una certificación que distingue a las empresas que demuestran un compromiso genuino con la sostenibilidad. La certificación evalúa la gestión de recursos naturales, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, el bienestar animal, y la implementación de políticas de diversidad, equidad e inclusión, entre otros aspectos.
Gilberto Guzmán, director ejecutivo de Cargill en Colombia, destacó la relevancia de este logro: “Recibir el Sello Avícola en la categoría Diamante resalta el esfuerzo colectivo de Cargill por integrar prácticas responsables en cada aspecto de nuestro negocio. Este reconocimiento no solo subraya nuestro compromiso con la sostenibilidad, sino también nuestra capacidad para liderar con el ejemplo en el sector avícola.”
Cargill: Un modelo de sostenibilidad y responsabilidad social
La sostenibilidad en Cargill no es un simple concepto, sino una parte integral de su operación diaria. Un claro ejemplo de esto es la planta en Villagorgona, que se abastece en un 30% de energía solar, logrando reducir 10,071 toneladas de CO2 desde 2020. Este tipo de iniciativas reflejan el enfoque de la empresa hacia la creación de un futuro más sostenible.
Además, Cargill ha tenido un impacto significativo en la comunidad a través de sus programas de Seguridad Alimentaria, los cuales han involucrado a más de 3,450 personas en jornadas educativas sobre alimentación saludable. También han implementado más de 50 patios productivos y huertas caseras, contribuyendo al desarrollo de las comunidades locales.
Guzmán subraya: “Continuaremos trabajando como organización para mejorar y ampliar nuestras prácticas sostenibles, con la convicción de avanzar en procesos de mejora continua e innovación. Nos aseguraremos de que cada acción que tomemos contribuya a un futuro más responsable, significativo y sostenible.”
Compromiso con la diversidad, equidad e inclusión
El compromiso de Cargill con la sostenibilidad también se refleja en su enfoque hacia la diversidad, equidad e inclusión (DEI). En la región Caribe, la compañía ha creado 700 empleos, destacándose la incubadora Mahates, donde el 50% de los colaboradores son mujeres y el 60% de los jóvenes han iniciado su vida laboral allí. En la granja El Vínculo, en el Valle del Cauca, 100% del liderazgo está compuesto por mujeres, reafirmando el compromiso de la empresa de alcanzar la paridad de género en el liderazgo para 2030.
El proceso de certificación: Un estándar de excelencia
La obtención del Sello de Sostenibilidad Avícola en la categoría Diamante no es casual. Cargill ha pasado por un riguroso proceso de auditoría que evaluó todos sus procesos productivos, desde oficinas hasta plantas. Esta auditoría concluyó que la empresa cumple con altos estándares en gestión de recursos, reducción de emisiones, bienestar animal y responsabilidad social.
ICONTEC, la entidad certificadora, ha notificado oficialmente a Cargill sobre la obtención de la certificación y entregado el manual de uso correspondiente. El Sello de Sostenibilidad Avícola tiene una vigencia de tres años, lo que motiva a Cargill a seguir liderando con un enfoque en la mejora continua y el compromiso con un futuro más sostenible.
Este reconocimiento no solo resalta el liderazgo de Cargill en sostenibilidad, sino que también establece un estándar para la industria avícola en Colombia, demostrando que es posible combinar rentabilidad con responsabilidad social y ambiental.