Aunque el dólar se está fortaleciendo frente a la mayoría de las monedas, los analistas atribuyen el desplome del peso a una crisis de confianza en Colombia.
“El dólar fuerte es bueno para los EE.UU., pero malo para el mundo”, decía hace poco un titular del New York Times, aludiendo a la creciente fortaleza del billete verde cuya fortaleza pone en jaque tanto a los países desarrollados como a los emergentes.
“Para el resto del mundo, es una situación sin salida”, dijo Eswar Prasad, profesor de economía en Cornell y autor de varios libros sobre monedas. Al mismo tiempo, dijo al mismo medio, el banco central (la Reserva Federal) no tiene más remedio que actuar agresivamente para controlar la inflación: «Cualquier retraso en la acción podría empeorar las cosas».
En un país afectado por una crisis de confianza, alimentada por la declaraciones sobre el no otorgamiento de nuevos contratos de exploración de funcionarios del Gobierno y el propio presidente, Gustavo Petro, el dólar alcanzó este lunes 24 de octubre un nuevo máximo de $4.999, con un cierre de $4.990 y un promedio de $4.968, según la plataforma Set-Fx, (de hecho, en la jornada solo se negociaron US$950,7 millones).
Si bien es cierto que la devaluación hace más competitivas las exportaciones colombianas, también lo es que se traslada a la inflación, que en septiembre alcanzó el 11,44%, lo cual a su vez obliga al Banco de la República a elevar sus tasas de interés.
Pero además la devaluación encarece la deuda externa publica y privada que, en julio, llegó a US$176.098 millones (US$100.826 millones corresponden a la pública y US$75.272 millones a la privada).
Este viernes, la junta directiva del Emisor tomará su decisión de tasa de interés de cierre de octubre. Aunque el mercado espera un mínimo incremento de 100 puntos básicos en la tasa repo, algunos analistas consideran que la subida podría ser de hasta 150 o 200 puntos.
“De esta manera, la tasa de interés de referencia se ubicaría como mínimo en un 11,0%, con el objetivo de frenar la demanda agregada, los altos precios de cotización en el USD y los elevados niveles de inflación”, según un análisis de Acciones y Valores.
De materializarse el alza de 100 puntos, tasa de intervención del Emisor alcanzaría su nivel más alto desde julio del 2001.
«La inflación observada y las expectativas continúan al alza, la actividad económica presenta tasas de expansión robustas y en lo corrido del año el mercado laboral ha cerrado su brecha frente a los niveles prepandemia», según un informe de Corficolombiana.
«Dado que la tasa de intervención ya está en niveles elevados y en términos reales está en niveles contractivos y en aumento, esperamos que la junta mantenga un enfoque de incrementos considerables pero graduales (…), mandando un mensaje de compromiso con el cumplimiento de la meta de inflación en el mediano plazo», agregó.
Los bonos en moneda local de Colombia han perdido casi 24% en términos de dólares desde que Petro fue elegido en junio, el peor desempeño en un índice de deuda de mercados emergentes de Bloomberg que perdió cerca de 6% durante ese período. Y el peso se ha debilitado más de 20% en el mismo período, la mayor caída entre los principales mercados emergentes.