En una respuesta sin precedentes a la propagación global de la influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP), más de 500 expertos, autoridades sanitarias, representantes del sector privado y líderes políticos se reunieron en Brasil para participar en el primer diálogo mundial multisectorial sobre esta enfermedad viral. El encuentro, impulsado por la FAO y el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Brasil, tuvo como objetivo definir una estrategia coordinada frente a una amenaza que compromete la salud animal, humana y los medios de vida de millones de productores.
La influenza aviar, altamente contagiosa y perteneciente a la familia de la influenza tipo A, ha mostrado una rápida expansión desde 2020, afectando aves, mamíferos, ecosistemas y cadenas productivas en todos los continentes. El virus circulante ha sido detectado en más de 83 especies de mamíferos, incluido el ganado lechero, lo que refuerza su potencial pandémico y la urgencia de una respuesta global.
“La influenza aviar ya no es una amenaza esporádica; se ha convertido en un desafío mundial. Ningún país o sector puede enfrentarlo de forma aislada”, afirmó Beth Bechdol, Directora General Adjunta de la FAO. “Una colaboración basada en la ciencia es esencial para proteger nuestros sistemas agroalimentarios, medios de vida y la salud pública”.
Durante el evento, titulado “Abordar juntos la influenza aviar de alta patogenicidad: diálogo mundial sobre ciencia, políticas y sector privado”, se abordaron temas prioritarios como la implementación de sistemas de alerta temprana, estrategias de vacunación, medidas de bioseguridad y coordinación multisectorial bajo el enfoque de Una sola Salud. También se compartieron soluciones innovadoras para el diagnóstico, la vigilancia y la respuesta a brotes, especialmente en países de bajos ingresos y sistemas avícolas informales.
Carlos Fávaro, ministro de Agricultura y Ganadería de Brasil, destacó la respuesta rápida del país ante la detección de IAAP en una granja comercial este año, subrayando la credibilidad del sistema sanitario brasileño. “Este desafío debe abordarse con total transparencia. Solo así podemos generar confianza y salvaguardar la seguridad alimentaria mundial”, señaló.
El diálogo también sirvió para impulsar la Estrategia Mundial para la Prevención y el Control de la IAAP, lanzada recientemente por la FAO y la OMSA, que busca fortalecer los planes de acción nacionales y regionales, y reducir los riesgos transfronterizos y pandémicos.
“La mejora de la vigilancia, la bioseguridad y la vacunación, combinadas con un control rápido de la enfermedad, son claves para enfrentar la influenza aviar”, afirmó Thanawat Tiensin, Jefe Veterinario de la FAO. “Se requiere un enfoque holístico y una alianza sólida con el sector privado para reducir eficazmente el riesgo para las generaciones futuras”.
Por su parte, Ricardo Santin, presidente de la Asociación Brasileña de Proteína Animal y del Consejo Avícola Internacional, subrayó que el impacto de la influenza aviar trasciende el ámbito sanitario. “Es un problema con efectos directos en los flujos comerciales, la inflación y la seguridad alimentaria mundial. Requiere cooperación internacional guiada por la ciencia y una revisión profunda de conceptos y paradigmas”.