En un esfuerzo conjunto liderado por USAID, Nestlé y la Fundación ACDI/VOCA-LA, 119 jóvenes de diversas regiones de Colombia están transformando el sector agropecuario con el proyecto «Agro-Emprendimiento». Este programa no solo fortalece sus negocios, sino que también les da herramientas para revitalizar el campo y contribuir al desarrollo sostenible del país.
Impacto Económico y Social
El sector agropecuario representa el 9,2% del PIB de Colombia y genera empleo para más del 17% de la población activa. Sin embargo, este motor de la economía enfrenta retos significativos, especialmente en las regiones rurales históricamente afectadas por el conflicto. Aquí es donde entra en juego «Agro-Emprendimiento», un programa diseñado para ofrecer formación técnica, equipos especializados y asistencia psicosocial, impulsando negocios locales como:
- Platanitos de Bojayá (Chocó): Una iniciativa que recupera la riqueza agrícola del territorio.
- Tienda de café en Vista Hermosa (Meta): Proyectos que conectan calidad y tradición.
- Apicultura y fruticultura en Caquetá: Negocios sostenibles que promueven la conservación ambiental.
Con estas acciones, los jóvenes han logrado un incremento promedio del 20% en sus ventas, estableciendo sus marcas en ferias de alto impacto y abriendo mercados internacionales con productos como el aguacate Hass y la granadilla.
Formación y Sostenibilidad
La formación ofrecida incluye estrategias de comunicación, diseño de empaques y prácticas sostenibles, que no solo mejoran la competitividad de los productos, sino que también fortalecen la conservación de ecosistemas. Esto es especialmente relevante en regiones como Florencia, Tibú y La Macarena, donde se busca equilibrio entre desarrollo económico y cuidado ambiental.
Un Ejemplo para el Sector Privado
Este modelo de intervención integral demuestra cómo el sector privado puede catalizar la transformación social y económica en las zonas rurales de Colombia. Nestlé, USAID y la Fundación ACDI/VOCA-LA han establecido un precedente en el que la colaboración intersectorial genera resultados tangibles, fortaleciendo la productividad y la sostenibilidad del agro colombiano.
Conclusión
«Agro-Emprendimiento» no es solo un programa, es una ventana hacia el futuro del campo colombiano. Jóvenes empoderados, comunidades revitalizadas y un sector agropecuario más competitivo son el legado de una iniciativa que redefine el emprendimiento rural y lo coloca en el corazón del desarrollo sostenible.o colombiano. Jóvenes empoderados, comunidades revitalizadas y un sector agropecuario más competitivo son el legado de una iniciativa que redefine el emprendimiento rural y lo coloca en el corazón del desarrollo sostenible.