La amenaza de los deepfakes, alimentada por herramientas de inteligencia artificial (IA) generativa, está en aumento, con el 47% de las organizaciones ya habiendo enfrentado algún tipo de ataque de este tipo. Un nuevo estudio global revela que el 70% de las empresas cree que el impacto de estos ataques será significativo para sus operaciones, y están actuando en consecuencia.
Un informe reciente de iProov, un proveedor líder en soluciones de identidad biométrica, ha puesto de manifiesto que el 75% de las organizaciones que están implementando medidas para combatir los deepfakes se están inclinando por soluciones biométricas. El estudio, titulado «The Good, The Bad, and The Ugly», encuestó a 500 líderes tecnológicos en seis países, incluyendo Reino Unido, Estados Unidos y Brasil, y destaca una tendencia clara: la biometría está emergiendo como la primera línea de defensa contra la manipulación digital.
El Desafío de los Deepfakes
Los deepfakes, que son esencialmente videos o imágenes alterados digitalmente para crear una falsa representación, están siendo usados cada vez más por actores malintencionados para perpetrar fraudes, especialmente en el ámbito financiero. Según la encuesta, el 62% de las organizaciones se muestra
preocupada porque sus medidas actuales podrían no ser suficientes para enfrentar esta creciente amenaza.
Andrew Bud, fundador y CEO de iProov, comenta: «El avance en la creación de deepfakes es alarmante. En tan solo seis meses, hemos visto un salto significativo en la calidad de estos videos, haciéndolos casi imposibles de detectar con el ojo humano. Las organizaciones necesitan adoptar soluciones más robustas para protegerse, y la biometría ha demostrado ser la más efectiva.»
Regionalización de la Amenaza
El estudio también revela diferencias notables en la percepción y experiencia con deepfakes a nivel regional. Por ejemplo, en la región de Asia-Pacífico (APAC) y Europa, más del 50% de las organizaciones han sido víctimas de deepfakes, en comparación con el 34% en América del Norte. Esto subraya la necesidad de una estrategia de seguridad cibernética adaptada a las particularidades de cada región.
La IA: Una Herramienta de Doble Filo
A pesar de los riesgos, la IA no es vista únicamente como una amenaza. El 84% de las organizaciones considera que la misma tecnología que genera deepfakes también es crucial para combatirlos. La mayoría ha comenzado a implementar políticas internas y a aumentar su presupuesto destinado a tecnologías de IA, lo que refleja un enfoque proactivo ante este desafío.
El Rol de la Biometría en la Protección de Datos
La adopción de soluciones biométricas no se limita a la detección de deepfakes. Las organizaciones están utilizando la biometría para una variedad de aplicaciones, desde la autenticación de usuarios en el inicio de sesión hasta la verificación en transacciones financieras. El 94% de los encuestados enfatiza la importancia de contar con un socio especializado en seguridad biométrica, que ofrezca no solo software, sino también servicios de monitoreo continuo y soluciones multimodales que se adapten al cambiante panorama de amenazas.
Conclusión
El riesgo que representan los deepfakes es real y está creciendo rápidamente. Las organizaciones, especialmente en sectores como banca y telecomunicaciones, están respondiendo con una fuerte adopción de tecnologías biométricas. Sin embargo, la amenaza continúa evolucionando, y las empresas deben mantenerse a la vanguardia para proteger tanto a sus usuarios como a sus activos de las sofisticadas tácticas cibernéticas que emplean los deepfakes.
Este estudio es un recordatorio contundente de la necesidad de soluciones innovadoras y resilientes en un mundo donde la tecnología, tanto buena como mala, está en constante avance.