Este jueves, el dólar alcanzó un mínimo de $4.876 y un máximo de $4.901 en una jornada en la que se negociaron US$1.387 millones en 2.737 operaciones.
La inflación de EE. UU. se ‘enfrió’ en octubre más de lo previsto, según el Departamento de Trabajo de ese país, lo que constituye una buena noticia para los mercados, ya que un menor alza en el costo de vida le brindará al banco central espacio para frenar sus fuertes aumentos de las tasas de interés.
El índice de precios al consumidor subió un 7,7% respecto al año anterior, el avance anual más pequeño desde el comienzo del año y un descenso del 8,2% en septiembre, según reveló Bloomberg. Los precios subyacentes, que excluyen los alimentos y la energía y se consideran un mejor indicador subyacente de la inflación, avanzaron un 6,3 %, retrocediendo desde el máximo de 40 años del mes anterior.
De hecho, el martes y este jueves, el dólar cayó más de $250, alcanzó un mínimo de $4.876 y un máximo de $4.901 en una jornada en la que se negociaron US$1.387 millones en 2.737 operaciones.
En casas de cambio la divisa la están vendiendo en $4.850, unos $70 pesos que el fin de semana, según un sondeo de este medio.
Y aunque la desaceleración de los precios subyacentes es una buena noticia, la inflación sigue siendo demasiado alta para la comodidad de la Reserva Federal, según Bloomberg.
Tras el dato, los rendimientos del Tesoro se desplomaron, mientras que los futuros de acciones estadounidenses subieron y el índice del dólar cayó.
Los funcionarios de la Fed tendrán a mano otro informe del IPC y un informe de empleo antes del final de su reunión de política de dos días a mediados de diciembre.