En el umbral del año 2024, las empresas en Colombia enfrentan desafíos sustanciales que moldearán sus trayectorias. Aproximadamente el 80% de las mipymes en el país carecen de una visión a largo plazo, planes y estrategias estructuradas, creando un panorama donde la falta de planificación se erige como una barrera para anticiparse a las realidades del entorno empresarial.
La incertidumbre que emana de las políticas gubernamentales actuales contribuye a un entorno macroeconómico inestable, sembrando inquietud y precaución entre los empresarios colombianos. La desaceleración económica, evidente en la disminución de la inversión y el consumo, presenta un desafío adicional para las organizaciones que buscan preservar su crecimiento en este contexto.
Luis Felipe Betancur, director general de Magic E Lab, señala que «los grandes desafíos para las empresas colombianas radican en la poca planeación y estrategia de los emprendedores y empresarios para anticiparse a las realidades del entorno». La percepción de la inversión en conocimiento e innovación como un gasto y no como una herramienta esencial para la competitividad es otro obstáculo clave que deben superar.
«Los grandes desafíos para las empresas colombianas radican en la poca planeación y estrategia de los emprendedores y empresarios para anticiparse a las realidades del entorno», Felipe Betancur.
Según el Informe Nacional de Competitividad 2022 – 2023, solo el 0,5% de las empresas del sector industrial manufacturero implementaron innovación dura, y en el sector de servicios y comercio, la cifra disminuyó al 0.1%. En total, se estima que la implementación de innovación dura en Colombia es inferior al 1%, mientras que aproximadamente el 20% opta por la innovación blanda.
Betancur insiste en la importancia de cambiar la mentalidad de los líderes empresariales: «Es necesario transformar la mentalidad de los líderes y responsables de los emprendedores y empresarios». La urgencia y la perspectiva a corto plazo a menudo impiden ver los factores de crecimiento como una inversión en lugar de un gasto.
Para el año 2024, es imperativo que los empresarios adquieran formación en gestión de la innovación, centrándose en la rentabilidad, captación de nuevos clientes, posicionamiento, sostenibilidad y desarrollo de nuevos conocimientos. Esto les permitirá anticiparse al contexto actual y construir un futuro sólido.
A pesar de los desafíos, existen programas de apoyo gubernamental y otras iniciativas orientadas a fortalecer los procesos de innovación y crecimiento empresarial. Sin embargo, desde un punto de vista estructural, es esencial intensificar los esfuerzos en áreas como la educación, la mentalidad y la cultura, para impulsar un cambio profundo en la percepción de la inversión en conocimiento.
En este contexto desafiante, se espera que las empresas colombianas aprovechen todas las herramientas disponibles para superar las barreras existentes, aplicar procesos de innovación y generar estrategias pertinentes que les permitan obtener resultados significativos en un entorno empresarial en constante evolución. La innovación no solo es una necesidad, sino una clave para la sostenibilidad y prosperidad en un panorama empresarial desafiante.