A pesar de los avaces, se mantienen las brechas de género en las dimensiones de acceso y uso. Por ejemplo, el 29% de los hombres colombianos tiene una cuenta de ahorros no vinculada a una tarjeta de débito, mientras que el caso de la mujer esta cifra es del 27%.
El 45% de las mujeres colombianas tiene una billetera móvil, lo que representa un avance de casi el doble frente al 25% en 2021, reveló el estudio Brechas de Género en la Inclusión Financiera 2022 del Grupo Credicorp que mide el acceso, el uso y la calidad percibida de mujeres y hombres en el sistema financiero de América Latina.
En el caso de los hombres, los colombianos registraron un avance mucho más marcado en la tenencia de billeteras digitales, pues el porcentaje de los que cuentan con esta plataforma creció de 22% a 47% en un año, o sea registró una variación de 25 puntos porcentuales.
El mayor número de personas con acceso a una billetera móvil es considerado un avance importante ya que estos productos pueden contribuir notablemente a la inclusión financiera.
“Las billeteras móviles constituyen un aliado para incluir a cada vez más colombianos en el sistema. En muchos casos, estos canales representan el primer contacto con el mundo financiero, incluso antes de contar con una cuenta bancaria”, explica Silvia Noriega, gerente de Sostenibilidad de Credicorp.
Según la investigación, el 23% de las colombianas alcanzó un nivel óptimo de inclusión financiera, frente a un 12% en 2021. Gracias a este avance, la brecha de género en inclusión financiera en Colombia se redujo de 6 puntos a 4 puntos porcentuales en un año, pues en el 2021, el 18% de los hombres tenía un nivel logrado de inclusión financiera y en el 2022 el porcentaje subió a 27%.
El estudio de brechas de género nace del Índice de Inclusión Financiera de Credicorp realizado por Ipsos en ocho países de la región: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá y Perú.
A nivel regional, Colombia se ubica en el quinto puesto del ranking con mayor porcentaje de mujeres incluidas adecuadamente en el sistema financiero (23%). Panamá (37%), Chile (36%), Argentina (28%) y Ecuador (25%) le anteceden, y le siguen México (22%), Perú (14%) y Bolivia (11%).
Una persona que alcanza un alto grado de inclusión financiera tiene acceso a diversos productos y servicios del sistema financiero formal, los usa de manera eficiente y genera una relación informada, sana y positiva con el sistema financiero.
En Colombia, al igual que en todos los países de la región, se mantienen las brechas de género en las dimensiones de acceso y uso. Por ejemplo, el 29% de los hombres colombianos tiene una cuenta de ahorros no vinculada a una tarjeta de débito, mientras que el 27% de las mujeres posee alguna. Sucede lo mismo con la tarjeta de débito (41% vs 32%) y la tarjeta de crédito (24% vs 19%).
De otro lado, los hombres afirman realizar 5.4 transacciones financieras al mes, en tanto que las mujeres realizan 4 al mes. Los resultados de Colombia en cuanto al uso están por debajo de la media regional: hombres (6.5 transacciones al mes) y mujeres (5.8). Finalmente, en la dimensión de calidad percibida, Colombia tiene un mayor porcentaje de mujeres que los hombres respecto a la confianza hacia el sistema financiero: 38% de las mujeres y 36% de los hombres.