La industria de la moda, a pesar de su glamur y constante innovación, enfrenta un desafío crucial: la sostenibilidad. Aunque el mercado de la moda en Colombia sigue mostrando un crecimiento saludable, con un valor de 5,48 billones de pesos en los primeros meses de 2024 según Inexmoda, solo el 1% de los materiales textiles a nivel global se reintegran en ciclos productivos sostenibles. Este hecho pone en evidencia la gran distancia que aún existe entre la moda y la sostenibilidad.
Un vistazo al estado actual de la moda sostenible
El debate sobre la sostenibilidad en la moda ha cobrado fuerza en eventos como la Semana de la Sostenibilidad organizada por la EAE Business School Barcelona. Expertos como Tatiana Valoira, directora del Máster en Moda y Retail de EAE, y Ana Jiménez, Country Manager de GoTrendier Colombia, han puesto de relieve la urgencia de un cambio estructural en la industria.
Valoira subrayó la creciente demanda de los consumidores por prácticas sostenibles, lo que ha obligado a las marcas a repensar sus modelos de negocio. Sin embargo, la industria de la moda, reconocida como una de las más contaminantes, aún tiene un largo camino por recorrer. La producción masiva y la obsolescencia programada de las prendas siguen siendo grandes obstáculos para lograr una verdadera sostenibilidad.
Consumo inteligente: un paso hacia la sostenibilidad
Ana Jiménez, de GoTrendier, destacó la importancia del reúso en la reducción del impacto ambiental. Según datos de la ONU, prolongar la vida útil de la ropa podría reducir hasta un 25% de las emisiones de CO2 generadas por la industria textil cada año. «El consumo de moda de segunda mano no solo es una tendencia, es una necesidad imperante para mitigar el impacto ambiental», afirmó Jiménez.
El modelo de negocio de plataformas como GoTrendier ha demostrado ser un catalizador en la transformación de los hábitos de consumo de moda. El simple acto de reutilizar prendas puede evitar la emisión de hasta un 80% de CO2 por prenda, lo que resalta el impacto positivo de este enfoque.
Desafíos y estrategias en la industria fast fashion
A pesar de los avances, las marcas de fast fashion enfrentan retos significativos para alinearse con la sostenibilidad. Aunque algunas han comenzado a invertir en laboratorios de materiales sostenibles y programas de reciclaje, la constante necesidad de novedades efímeras dificulta la gestión sostenible.
Tatiana Valoira explicó que el ciclo rápido de producción en la moda, donde cada temporada se lanzan cientos de nuevas prendas, es incompatible con los principios de sostenibilidad. Este modelo, aunque popular, está siendo cada vez más cuestionado tanto por consumidores como por reguladores.
Innovación en materiales: la clave para un futuro sostenible
El desarrollo de materiales innovadores, como tejidos a partir de piña, naranja o incluso seda de araña, representa una de las mayores esperanzas para la moda sostenible. Sin embargo, estos procesos todavía enfrentan desafíos económicos y técnicos.
A pesar de estos obstáculos, Valoira expresó su optimismo en que la industria eventualmente adoptará estos materiales de manera más amplia. «Aunque el progreso es lento, confío en que la moda logrará integrar la sostenibilidad como un estándar, no como una excepción», concluyó.
La sostenibilidad en la moda no es solo una tendencia, sino una necesidad urgente. La transformación de la industria hacia prácticas más responsables no solo redefinirá cómo vestimos, sino también cómo cuidamos nuestro planeta. La moda sostenible, aunque aún en construcción, tiene el potencial de convertirse en una realidad tangible, liderada por la innovación, el consumo consciente y la responsabilidad compartida entre marcas y consumidores.