La creciente amenaza de sequías y la proyección de que más del 75% de la población mundial podría verse afectada para el año 2050 han impulsado a la industria hídrica a buscar soluciones innovadoras. En este contexto, la transformación digital ha emergido como un aliado crucial en la lucha por la eficiencia hídrica y la preservación de este recurso vital.
La digitalización ha propiciado una revolución en la gestión del agua, impulsando la optimización de datos como eje central de su evolución. Este enfoque ha permitido a la industria avanzar hacia el objetivo de lograr un carbono cero neto, un hito fundamental para mejorar la calidad de vida de comunidades en todo el mundo.
Con la inminente amenaza de sequías que podrían obligar a 216 millones de personas a migrar, la imperiosa necesidad de un uso más sostenible del recurso hídrico ha llevado a la industria a adaptarse y evolucionar. En este contexto, las empresas de agua y aguas residuales están realizando inversiones significativas en tecnologías y software que mejoran la visibilidad de la red y permiten un control en tiempo real.
Según Bluefield Research, la seguridad y ciberseguridad se han convertido en aspectos fundamentales para el sector hídrico. La protección de los sistemas de control contra ataques maliciosos se ha vuelto una prioridad, garantizando la integridad de los datos y la confiabilidad de las operaciones.
En este sentido, la compañía norteamericana Rockwell Automation se ha destacado como pionera en el desarrollo de soluciones que buscan elevar el desempeño de la industria del agua. Su enfoque se centra en la gestión y protección de la red, utilizando protocolos de comunicación avanzados, como el DNB gratuito con capacidad de reversión, que proporciona datos reales y resistentes.
Los expertos de Rockwell Automation, quienes compartieron sus ideas en el marco de Automation Fair, destacaron la importancia de la transformación digital para la gestión inteligente del agua. Utilizando protocolos robustos y comunicación efectiva, la compañía logra proporcionar a sus clientes información detallada sobre el estado de las operaciones, permitiendo una toma de decisiones informada y eficiente.
«La transformación digital hace posible que la gestión inteligente del agua exista. Hemos crecido con la resiliencia de los datos, utilizando ciertos protocolos de comunicación que proporcionan datos reales y resistentes. Esto realmente ayuda a crear una conciencia operativa de excelencia», señalaron los expertos de Rockwell Automation.
La convergencia de la transformación digital y la industria hídrica no solo apunta a optimizar la eficiencia del recurso hídrico, sino que también contribuye a la sostenibilidad y seguridad del agua en un mundo donde su escasez se vislumbra como uno de los mayores desafíos globales.