El país registrará la peor tasa de crecimiento de la economía en los últimos 15 años, excluyendo 2020, año de la pandemia.
El Producto Interno Bruto de Colombia varió -0,3% en el tercer trimestre del año, respecto al mismo periodo del 2022, como consecuencia de una caída significativa en los indicadores de la industria manufacturera del -6,2%; del comercio, la reparación de vehículos, el transporte, el alojamiento y los servicios de comida, que cayeron 3,5% y de la construcción, que decreció 8%.
Industria
Para la Asociación Nacional de Empresarios – ANDI este panorama es preocupante, particularmente la caída del 11% de la inversión, que no solo deprime el dinamismo de la economía, sino que además compromete el crecimiento futuro del país.
Algunos factores, sobre los cuales la Asociación ha venido llamando la atención desde hace meses y en los que coincide el Departamento de Administrativo Nacional de Estadística, son: la disminución de la demanda, las altas tasas de interés y los altos costos de producción, todo esto atravesado por la inflación. Otras causas igualmente de la desaceleración se basan en el deterioro en el clima para la inversión y los negocios.
“Este escenario complejo, no solo de desaceleración sino ya de decrecimiento, debe poner sobre la mesa, una vez más, la necesidad de que el país tome la decisión de crear e impulsar una estrategia de crecimiento económico potente y concreta, que reúna a todos los sectores económicos, responda a la realidad y a las necesidades del país y que se proyecte en el corto, mediano y largo plazo”, comenta Bruce Mac Master, presidente de la ANDI.
El dirigente gremial, agregó que “es necesario que se den las condiciones que permitan fortalecer la confianza para emprendedores e inversionistas en Colombia, que son quienes pueden generar nueva actividad económica en el país. Así mismo, vemos necesario que se reactiven y promuevan proyectos hoy detenidos entre el sector público y el empresarial, en ámbitos como el de la infraestructura, la salud y lo minero-energético”.
Comercio
Por su parte, el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, manifestó una vez más la necesidad urgente de que el Gobierno Nacional, convoque al sector privado para construir un plan de choque, que mitigue una posible recesión económica.
“Es urgente aunar esfuerzos para que el país no caiga en una situación económica insostenible, toda vez que los tres sectores con los peores resultados fueron la industria, la construcción y el comercio, que son precisamente los grandes generadores de empleo y grandes aportantes al PIB”, agregó el vocero de los comerciantes.
Al desglosar los datos del clúster del comercio, se observa que el desplome ha sido parejo: el comercio retrocedió 2.9%, el transporte, 3.9% y el sector de alojamiento y servicios de comida fue el de peor desempeño con una caída en el trimestre del 4.5%.
Destacamos igualmente como hecho muy negativo el estancamiento en el consumo de los hogares, que solo creció un 0.4%, como consecuencia, en gran medida, del impacto de la pasada reforma tributaria. Más grave aún, la caída del 33.5% en la inversión.
Construcción
“La construcción fue el sector que presentó la caída más importante, con un decrecimiento del 8 % frente al tercer trimestre del 2022, que se explica por las contracciones del 5 % en edificaciones y del 15 % en obras civiles”, señala Guillermo Herrera, presidente ejecutivo de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol). El caso puntual de la contracción del 5 % en el PIB de edificaciones se explica por el componente de la producción residencial, que disminuyó 7,7 % en el periodo analizado.
Los resultados del PIB del tercer trimestre del año son consecuentes con la dinámica de los principales indicadores del sector. De acuerdo con la información de Coordenada Urbana, en lo corrido del 2023 se dejaron de vender 97.000 viviendas nuevas en Colombia, de las cuales 77.000 fueron viviendas de interés social (VIS). Entre enero y octubre del 2023, las ventas de vivienda cayeron un 45,7 %, afectando los inicios de obra que se contrajeron a una tasa del 27%, incidiendo en el resultado más reciente del PIB de edificaciones.
Las cifras preocupan y hacen más evidente la necesidad de implementar una estrategia contracíclica efectiva para materializar los anuncios que ha hecho el Gobierno en lo corrido del 2023. Reducir la incertidumbre, como la que se genera con medidas que se encaminan a incrementar el predial, y recuperar la confianza de los compradores y empresarios, será fundamental para retomar una dinámica de crecimiento de la economía en el corto plazo.