El panorama empresarial en Latinoamérica se enfrenta a una amenaza cada vez mayor, con un incremento alarmante en los ciberataques que afectan a todas las industrias. Según datos de Check Point Research, durante el primer trimestre de 2024, se registraron en promedio 1.308 ciberataques semanales a nivel mundial, representando un aumento del 28% en comparación con el último trimestre de 2023.
La ciberseguridad ha pasado a ser un desafío crítico para los sistemas de control industrial, tecnologías operativas (OT) y sistemas de tecnología de la información (TI). En un entorno donde las amenazas son cada vez más sofisticadas y provienen de múltiples fuentes, las organizaciones deben estar preparadas para proteger sus activos digitales.
Un estudio reciente de Fortinet revela que en 2023, las regiones de Latinoamérica y el Caribe experimentaron 200.000 millones de intentos de ciberataques, lo que representa el 14,5% del total global. Estas cifras subrayan la urgencia de aumentar la conciencia en la industria sobre la importancia de la ciberseguridad, un aspecto crítico que afecta a todas las áreas del negocio, desde la innovación y la transformación digital hasta la sostenibilidad y el impacto social.
Los ciberataques están en constante evolución, lo que obliga a las empresas a anticiparse a los desafíos mediante la implementación de soluciones de ciberseguridad que protejan sus activos conectados en red. La exposición a vulnerabilidades es una realidad para muchas organizaciones, y una estrategia integral debe considerar la seguridad como un elemento clave para mantener la continuidad operativa.
En este contexto, identificar los activos y las vulnerabilidades de una organización es esencial para establecer los riesgos y determinar las soluciones de ciberseguridad adecuadas. Este tema fue central en el reciente evento ROKTOP de Rockwell Automation, celebrado en Bogotá, donde expertos en ciberseguridad compartieron más de un siglo de experiencia en soluciones de OT, diseñadas para proteger operaciones críticas en sectores como Oil & Gas y Alimentos y Bebidas.
Estos sectores son particularmente vulnerables a interrupciones en sus procesos, lo que puede dificultar la activación de planes de contingencia y la recuperación de información vital. Las consecuencias incluyen pérdidas financieras y comerciales significativas, así como un impacto negativo en la reputación de la marca.
Para abordar estas amenazas, Rockwell Automation ofrece una gama de soluciones que abarcan desde la gestión de automatización e infraestructura hasta la transformación digital y la ciberseguridad. Soluciones como el Supply Change Managing y el Table Top aseguran un protocolo de control de incidentes robusto, garantizando la continuidad del negocio en el menor tiempo posible.
Dada la creciente frecuencia y sofisticación de los ciberataques dirigidos a la infraestructura de OT y los sistemas de control industrial (ICS), es crucial que las industrias definan iniciativas de transformación digital que se adapten a sus necesidades específicas. Esto no solo reduce los riesgos y previene los ataques, sino que también protege las operaciones críticas de las empresas en la región, asegurando su resiliencia y éxito a largo plazo.