La interoperabilidad en los sistemas de salud está emergiendo como un pilar fundamental para mejorar la calidad de vida en las comunidades. Un informe reciente de la encuesta Digital Health Most Wired (DHMW), realizado por CHIME e InterSystems, subraya cómo la adopción de tecnologías interoperables está transformando la manera en que las entidades médicas manejan la información y colaboran entre sí.
Colombia a la Vanguardia: Plan Nacional para la Interoperabilidad
El Ministerio de Salud de Colombia ha lanzado un ambicioso plan de adopción territorial de la Historia Clínica Electrónica (IHCE) para el periodo 2023-2025. Este proyecto tiene como objetivo financiar la implementación y expansión de sistemas interoperables en todo el país, permitiendo a las instituciones de salud compartir y utilizar información médica de manera más eficaz. Esta iniciativa busca no solo optimizar la gestión de los servicios de salud, sino también asegurar una atención más personalizada y oportuna para los pacientes.
La Interoperabilidad como Motor de Cambio en la Salud Pública
La interoperabilidad se define como la capacidad de diferentes sistemas y organizaciones para intercambiar y utilizar información médica en forma colaborativa. Este intercambio de datos, bajo estándares internacionales, permite a los países monitorizar de manera dinámica las necesidades de salud de su población, facilitando la toma de decisiones informadas y la planificación de estrategias de salud pública más efectivas.
En Colombia, el marco regulatorio para la interoperabilidad se estableció con la resolución 866 de 2021. A pesar de los desafíos que implica la implementación de este tipo de tecnología —incluidos problemas de financiamiento, infraestructura y capacitación del personal— el
Gobierno Nacional ha adoptado un enfoque intersectorial para asegurar el éxito del proyecto. Según Andrés Torres, ejecutivo de ventas de InterSystems Latam, «la interoperabilidad es crucial para gestionar enfermedades crónicas y mejorar la atención médica, especialmente considerando que el 80% del estado de salud de un individuo depende de factores externos al sistema de salud tradicional».
Beneficios de un Sistema de Salud Interoperable
- Mejora en el Intercambio de Datos: La encuesta DHMW indica que las entidades sanitarias están aumentando su capacidad para compartir información con proveedores externos, lo que fortalece la red de atención médica basada en el valor. Sin embargo, persisten desafíos técnicos y regulatorios que deben superarse para aprovechar plenamente estos avances.
- Facilitación de Transiciones Asistenciales: Clínicas y hospitales han adoptado sistemas automatizados para la transición y remisión de pacientes, lo que mejora la continuidad del cuidado y reduce los errores médicos. InterSystems recomienda una estrategia integral que facilite el acceso a la Historia Clínica Electrónica a nivel regional y nacional.
- Manejo de la Salud de la Población: La adopción de tecnologías para la gestión de enfermedades crónicas y la integración de datos generados por los pacientes, como aquellos obtenidos a través de la telesalud, son esenciales para mejorar los resultados de salud en las comunidades.
Hacia una Atención Médica Más Conectada
La interoperabilidad en los sistemas de salud es más que una tendencia tecnológica; es un factor clave para el futuro de la atención médica. A medida que las entidades de salud continúan mejorando sus capacidades tecnológicas, es vital que los líderes del sector implementen estrategias robustas que involucren a todos los actores clave. Solo así será posible crear un entorno sanitario más eficiente y centrado en el paciente, capaz de responder a los desafíos actuales y futuros de la salud pública.